jueves, 6 de noviembre de 2008

Niño bandera

SIN TÍTULO - Antonio Berni
de la Serie Juanito Laguna


Discover Mercedes Sosa!



Niño bandera,
señal de ambición ajena.
Ojitos de humo triste

y de pobreza,
cómplice obligado de la miseria.

Dónde está tu futuro
si cada gota de cielo te entierra un sueño.
Dónde está tu esperanza
que se fue pintando el verde sojal,
la soja verde.
Camina niño,
detrás de la alambrada
y del "mosquito" que te envenena,
unas manos te esperan.
Una mano extendida
y la otra alzada,
están las manos de tu maestra.
Ellas son la señal
de tu existencia.

Los "niños bandera" son marcas humanas que, en el norte de mi provincia, señalan los campos donde la avioneta, "el mosquito", debe fumigar. Ellos son permanentemente rociados con plaguicidas. Fueron sus maestros, alertados por las largas ausencias por enfermedad de sus alumnos, quienes investigaron y alzaron sus voces de denuncia. Sus maestros, mis colegas tantas veces vapuleados, manoseados, incomprendidos y envenenados por otros "mosquitos".

18 comentarios:

lisebe dijo...

Ahora que tengo unos minutitos quería aportar mi comentario indignada Mara por lo que está ocurriendo en pleno siglo XXI, siglo de las grandes tecnologías, pero que cada vez más nos estamos "deshumanizando ", los niños que son el "futuro" de nuestro planeta, ya sea de la manera que explicas (que está pasando en tu pais) o de otras muchas más atroces intentan cargarse de un plumazo su inocencia, se están haciendo grandes antes de tiempo, o bien acabando con ellos.

Es una pena, que nos llamemos "homo sapiens sapiens" cuando un animal tiene más humanidad que nosotros mismos.

Apelo a la leyes de derechos humanos que dicen dictar dichas leyes para mantener a nuestros niños, de una manera digna, ¡Que és lo que están haciendo!!!

Nada!!!! Hipócritas de corbata y chaqué que se ponen delante de un atril hablando falacias políticas pero que en resumidas cuentas tan solo son eso "palabreria barata".

Me uno a tu denuncia y delato a cualquier persona que en el nombre de un pais demócrata haga politica de nuestros niños y en definitiva de nuestro futuro.

Muchos besitos Mara

maracuyá dijo...

lisebe...bienvenida!!! se te extraña.
Qué más decir si vos lo has hecho tan claramente. Pobres políticos que ignoran...ignoran? cuánto devuelve a la humanidad invertir en educación, en protección a la niñez. Futuro? Saben ellos de futuro, enfrascados en campañas políticas que le permitan perpetuarse en el poder. Los niños no votan lisebe, y cuando puedan hacerlo, si llegan, ya los habrán vuelto lo suficientemente ignorantes como para engañarlos.
Agradezco inmensamente que me hayas acompañado. No te pierdas. Besos.

Tumulario dijo...

El niño bandera, como el niño minero o el niño soldado.
Son la cara mas salvaje de la explotación, de la depraación humana.
Pero mientras tu, amiga mía y yo tu amigo sigamos poniendonos las zapatillas que fabrica, alimentandonos con el trigo que cultiva, comprando los diamantes que su sangre paga, seguiran estando.
Cuando la denuncia sirva para que obliguemos a nuestros gobernantes a hacer algo, entonces el niño bandera respirará aire sano, el niño minero verá la luz del sol y el niño soldado jugará en paz.

Un abrazo desde este tumulo hay mas gris todavía

Luis Antonio dijo...

Apoyo la denuncia de tales sucesos y comparto el contenido de los comentarios hechos por Lisebe -una buena amiga- y Tumulario.
Me sorprende que en un país civilizado como Chile ocurran esas cosas. Es intolerable y clama al cielo.
Un abrazo, Susi

maracuyá dijo...

Tumulario
el consumo de bienes necesarios no debe implicar la explotación de niños, ni de ningún ser humano. Sé que te refieres al consumismo, del cual está enferma nuestra sociedad y que tiene un precio demasiado alto. En pos de él las personas se esclavizan, se endeudan, se estresan, se alejan de sus afectos, se vuelven míseras emocionalmente y hasta se suicidan. Creo que todos tenemos la responsabilidad de educar a los niños para que puedan distinguir lo supérfluo de lo necesario, para que puedan reflexionar sobre si llevar una determinada marca de ropa o tener el último modelo de celular los hace más felices, enseñarles valores ligados a la solidaridad, cooperación, respeto por las diferencias (y con nuestros actos diarios, nada de cháchara, que los niños nos están mirando), hacerles saber que es su derecho ser escuchados, protegidos (aún, a veces, de sus propios padres)
La denuncia y el compromiso con ella son muy importantes, pero si no trabajamos con el futuro, como dice lisebe, serán inútiles.
Tumulario, gracias, tus comentarios siempre me llevan a más y eso es bueno. Ya pasaré por el túmulo a ver qué más gris hay.
Un gran beso

maracuyá dijo...

Luis
antes que nada quiero aclarar que mi país es Argentina, desconozco si en Chile pasa algo similar, ojalá que no y que esto no ocurriera en ningún lugar del mundo. Lamentablemente éste es sólo un ejemplo de la explotación de niños. Ya sabemos que en países que se dicen "civilizados" hay otros, no hay más que pensar que en la prostitución y la pornografía infantil, por decir uno. Ay...el tema da para mucho.
Besos Luis.

Luis Antonio dijo...

Sé que tu país, Mara, es Argentina. Lo de Chile ha sido un error y pido disculpas. La verdad es que sigo impresionado.Había oído hablar de la explotación de niños en algunos países asiáticos, y africanos, pero nunca llegué a imaginar que puediesen pasar semejantes cosas en el tuyo. Por otro lado, lo que dices de la prostitución infantil y pornográfica que se da en los "civilizados" también es cierto. Un abrazo

maracuyá dijo...

Luis
No dudo que sabes cual es mi país; la aclaración no fue para vos sino para que no quedara confuso si hubiera otros lectores. Quiero decirte que varias organizaciones han intervenido para terminar con esto, pero lamentablemente, todos sabemos que la
pobreza extrema lleva a situaciones en las que las mismas víctimas frenan las denuncias para no perder la única oportunidad que tienen de llevar unos centavos a la casa.
Mi país tiene muchas caras y no es una excepción dentro de latinoamérica, pero es mi país, y lo amo y no perderé el sueño de verlo más justo un día.
Otro beso.

Marysol Salval dijo...

Querida Mara: Casi me quedo sin palabras al leer sobre estos niños explotados en tu pais. Es una realidad muy dolorosa que por fortuna en Chile casi no se ve, salvo en casos aislados. Podemos ver cifras alarmantes sobre el trabajo infantil en el mundo,ofrecidas por la Unicef. De los 352 millones de niños y niñas entre cinco y 17 años que trabajan, 180 millones, uno de cada 12, lo hace en situaciones de explotación. Estos niños y niñas enfrentan a las peores formas de trabajo infantil, realizan trabajos peligrosos, son sometidos a esclavitud o trabajos forzados, son reclutados por grupos armados o utilizados para explotación sexual comercial o para realizar actividades ilegales. El 97% de ellos pertenecen a países en desarrollo. Una realidad a la que no podemos cerrar los ojos y debemos denunciar, mientras más voces seamos, más nos escucharán.
Te envío un abrazo, querida amiga.

©Claudia Isabel dijo...

Vi un documental sobre este tema y me cuesta creer que se pueda ser tan inhumano, que nadie tenga piedad por estos niños...me asusta saber que la gente se esta deshumanizando de una manera terrible...creo que el mundo se convierte en sodoma y Gomorra, y lo digo sin un atisbo místico- religioso porque no tengo religión, solo dosis altas de realidad...
Un abrazo

Tumulario dijo...

Mara, no solo hablaba de la fiebre del consumismo sino de la implicación de todos en un consumo responsable, de no comprar aquello que sabemos se ha fabricado sin las debidas "garantías", es decir sin explotación de menores, cuyos beneficós no soportan guerras, etc.

Se que es dificil y en algunos casos imposible, pero si todos nos implicasemos un poco en conseguirlo, quizas casos como el de los niños bandera empezarían a ser la excepción.

maracuyá dijo...

Marysol
las estadísticas informan y todo el mundo las lee casi a diario...lo peor es que nos van "anestesiando". Pero cuando pensamos que esos números contienen vidas, seres humanos, a mí, por lo menos, me da un escalofrío. Un abrazo Marysol

maracuyá dijo...

Claudia,
gracias por tu visita. Creo que si nos volvemos a mirar, realmente a mirar, el mundo quedaría habitado por estatuas de sal.
Cariños

maracuyá dijo...

Gracias Tumulario
vale tu aclaración. Un consumo responsable no es sólo no consumir lo innecesario sino ser conscientes de la procedencia. Como vos decís, difícil, pero no imposible. Hay que intentarlo.
Un abrazo

Anónimo dijo...

Su, qué hermoso lo que escribiste!!!!!!!!!!!!!! Me emocioné mucho!!!! Gracias por las cosas lindas que me mandás y me escribís. Besos a todos, siempre los recuerdo con muschísimo cariño. Me hicieron sentir como que estaba en mi escuela. Gracias!!!! RO

maracuyá dijo...

"Estabas" en tu escuela Ro...
vos nos hiciste sentir eso, que era tu escuela...lo sigue siendo
y ojo, no lo digo sólo yo.
Besos

Juan Antonio dijo...

Es inconcebible e inhumano la utilización de los niños para esos menesteres.
Alguien debería denunciar a esas empresas por tan grave delito contra la dignidad y salud de esos niños. Éstos no pueden quedar indefensos.

Me gustaría que, si te enteras, como evoluciona este caso, nos mantengas informados, pues nos hemos quedado profundamente impactados.

Un abrazo afectuoso.

maracuyá dijo...

Juan
Lamentablemente y como ya lo he dicho, éste es sólo un ejemplo de la explotación de niños. Con respecto a este tema, muchas organizaciones se han ocupado del mismo. Aparentemente no está sucediendo en estos momentos, pero no hay que descuidarse ya que a veces son las mismas familias, presionadas por la pobreza, quienes exponen a sus hijos a este tipo de trabajos. Te envío un gran beso Juan y gracias por estar.