
Los sueños, sueños son. Algunos imposibles, otros más cercanos. Yo los acaricio a todos por igual, nunca se sabe. Cuando menos lo esperas ves a uno venir hacia vos.
Ahora uno de los míos se ha adelantado y camino encandilada a su encuentro.
XXV
DISPOSICIONES
(Fragmento)
Compañeros, enterradme en Isla Negra,
frente al mar que conozco, a cada área rugosa
de piedras y de olas que mis ojos perdidos
no volverán a ver.
Cada día de océano
me trajo niebla o puros derrumbes de
turquesa,
o simple extensión, agua rectilínea, invariable,
lo que pedí, el espacio que devoró mi frente.
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saben
que allí quiero dormir entre los párpados
del mar y de la tierra . . .
Quiero ser arrastrado
hacia abajo en las lluvias que el salvaje
viento del mar combate y desmenuza,
y luego por los cauces subterráneos, seguir
hacia la primavera profunda que renace.
Abrid junto a mí el hueco de la que amo, y
un día
dejadla que otra vez me acompañe en la
tierra.
Pablo Neruda – Canto General XV – Yo soy

Sé que mi piel se erizará, mis piernas temblarán y mis lágrimas correrán nada más que por sentir la cercanía de los cauces subterráneos que llevan a Neruda y a Matilde en el hueco de tierra que los une. Sé que este sueño creció en otras circunstancias y que también eso sacudirá mi corazón. Sé que en un momento me quedaré inmóvil, que querré estar con los pechos al desnudo aunque de madera roída, pero ser aquella estatua destinada a sus ojos. Que me estremecerá su voz, tantas veces escuchada…paceré dormida, pero estaré viva en la ensoñación que me provocan sus palabras. Porque él estará ahí, yo lo sé. Lo sentiré.
A Una Estatua de Proa (Elegía)
(Fragmento)
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Hoy eres mía, diosa que el albatros gigante
rozó con su estatura extendida en el vuelo,
como un manto de música dirigida en la lluvia
por tus ciegos y errantes párpados de madera.
Rosa del mar, abeja más pura que los sueños,
almendrada mujer que desde las raíces
de una encina poblada por los cantos
te hiciste forma, fuerza de follaje con nidos,
boca de tempestades, dulzura delicada
que iría conquistando la luz con sus caderas.
Cuando ángeles y reinas que nacieron contigo
se llenaron de musgo, durmieron destinados
a la inmovilidad con un honor de muertos,
tú subiste a la proa delgada del navío
y ángel y reina y ola, temblor del mundo fuiste.
El estremecimiento de los hombres subía
hasta tu noble túnica con pechos de manzana,
mientras tus labios eran oh dulce! humedecidos
por otros besos dignos de tu boca salvaje.
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Hoy hemos recogido de la arena tu forma.
Al final, a mis ojos estabas destinada.
Duermes tal vez, dormida, tal vez has muerto,
muerta:
tu movimiento, al fin, ha olvidado el susurro
y el esplendor errante cerró su travesía.
Iras del mar, golpes del cielo han coronado
tu altanera cabeza con grietas y rupturas,
y tu rostro como una caracola reposa
con heridas que marcan tu frente balanceada.
Para mí tu belleza guarda todo el perfume,
todo el ácido errante, toda su noche oscura.
Y en tu empinado pecho de lámpara o de diosa,
torre turgente, inmóvil amor, vive la vida.
Tú navegas conmigo, recogida, hasta el día
en que dejen caer lo que soy en la espuma.
Pablo Neruda – Canto General – XIV - El gran océano
Muchos poemas de Neruda llevo enredados en la memoria. En silencio los ecos de los elegidos se repetirán dentro de mí. Isla Negra, refugio de ilusiones, de amores y dolores…que nada se interponga en el camino. Te he deseado tanto!!!
POEMA X
Hemos perdido aun este crepúsculo.
Nadie nos vio esta tarde con las manos unidas
mientras la noche azul caía sobre el mundo.
He visto desde mi ventana
la fiesta del poniente en los cerros lejanos.
A veces como una moneda
se encendía un pedazo de sol entre mis manos.
Yo te recordaba con el alma apretada
de esa tristeza que tú me conoces.
Entonces, dónde estabas?
Entre qué gentes?
Diciendo qué palabras?
Por qué se me vendrá todo el amor de golpe
cuando me siento triste, y te siento lejana?
Cayó el libro que siempre se toma en el crepúsculo,
y como un perro herido rodó a mis pies mi capa.
Siempre, siempre te alejas en las tardes
hacia donde el crepúsculo corre borrando estatuas.
Pablo Neruda – 20 Poemas de Amor – Poema X
Amigos, compañeros de ilusiones. Pronto me iré con una, la abrazaré, me hundiré, me fundiré, arderé en ella...y cuando vuelva les contaré.